jueves, 4 de diciembre de 2014

DANILO MEDINA: ¿PRAGMATISMO O RELATIVISMO MORAL?

El actual Presidente de la República Dominicana ha mantenido una impresionante tasa de aprobación durante los ya mas de dos años que lleva al frente de la jefatura del estado, esto se debe en gran medida a la inversión en educacion y a un inteligente manejo de las relaciones publicas, esto sumado a la forma en que evade tomar medidas o asumir posiciones que sean controversiales. Tal es el caso de los temas de migracion, ciudadania y aborto.

La misión y principal obligación de un Presidente de la República es cumplir y hacer cumplir las leyes y la constitución de la nación.  En materia migratoria Danilo Medina ha mostrado gran negligencia en la aplicacion de las leyes migratorias, ha detenido totalmente las deportaciones de los ilegales haitianos y ha accedido a ofrecer amnistía para quienes no han tenido el mas mínimo respeto por las leyes dominicanas. En lo relativo a quienes son ciudadanos dominicanos la constitución en su articulo 18 establece claramente quienes son dominicanos y quienes no, literalmente dice que los hijos de  extranjeros ilegales no son dominicanos:

Artículo 18.- Nacionalidad. Son dominicanas y dominicanos:

1) Los hijos e hijas de madre o padre dominicanos;

2) Quienes gocen de la nacionalidad dominicana antes de la entrada en vigencia de esta Constitución;

3) Las personas nacidas en territorio nacional, con excepción de los hijos e hijas de extranjeros miembros de legaciones diplomáticas y consulares, de extranjeros que se hallen en tránsito o residan ilegalmente en territorio dominicano. Se considera persona en tránsito a toda extranjera o extranjero definido como tal en las leyes dominicanas;

En cuanto a la cuestión del aborto es necesario recordar que el derecho a la vida es un derecho fundamental reconocido por la constitución:

Artículo 37.- Derecho a la vida. El derecho a la vida es inviolable desde la concepción hasta la muerte. No podrá establecerse, pronunciarse ni aplicarse, en ningún caso, la pena de muerte.

Como puede verse nuestra carta magna no deja margen de maniobra en relación a este espinoso tema. No importa lo que uno personalmente crea que es lo idealmente aceptable o lo que seria justo, el derecho a la vida es inviolable desde la concepción; esto significa que todo tipo de aborto esta fuera de discusión y por ende la interrupción del embarazo constituye homicidio. Esa es la realidad que plantea la constitución de la república, independientemente de que sea retrograda o no o si uno esta o no de acuerdo (Quien esto escribe es partidario de la legalizacion total del aborto dentro de las primeras 12 semanas de gestación cuando aun no hay un cerebro funcional en el cuerpo del infante).

Es preciso recordar que todos estos temas se discutieron ampliamente cuando la Asamblea Nacional en funciones de Asamblea Reformatoria Constituyente conocía la propuesta de reforma y es pertinente señalar que Danilo Medina tenia una importante cantidad de asambleistas que respondían a su corriente política y todos ellos sin excepción votaron por estos artículos, por ende es extraño que ahora como Presidente el Lic. Medina no deja de tomar medidas que contradicen sus posiciones anteriores y que se riñen directa mente con el orden constitucional vigente. 

Si el Presidente tenia reservas con relación al establecimiento del jus sanguinus o la equiparacion de los ilegales con los extranjeros en estado de transito o si era partidario de que exista el aborto de manera legal entonces debía haberlo dicho en aquel momento que era un aspirante presidencial con bastante influencia en el Congreso. El cambio actual, en nuestra opinión, no se trata de un simple pragmatismo que lo ha llevado a presentar una ley de naturalización que es contradictoria a la constitución y a la sentencia del Tribunal Constitucional y mas recientemente a observar el nuevo Código Penal por motivo de las penas previstas para quienes practiquen abortos; las nuevas posiciones del Presidente Medina muestran una evidente inclinación por evitar tomar decisiones firmes aun cuando estas tengan el amparo de la Constitución y las leyes, Danilo Medina no tiene el coraje para enfrentar nada que pueda mellar su popularidad o que lo pueda colocar en una posición incomoda dentro o fuera del país.Su objetivo es mantener su imagen y popularidad sin importar si sus principios se ven comprometidos, naturalmente si es que Danilo Medina tiene principios morales y politicos claros pero despues de estos dos años nadie puede saberlo con certeza.