Es increíble la irresponsabilidad con la que los gobiernos municipales se manejan. El despilfarro de recursos en obras insignificantes e innecesarias (eje. los parques canquiña y el infame parque temático de Roberto Salcedo), la incapacidad para afrontar problemas tan cotidianos como la recogida de basura, la señalización de calles, arreglo y mantenimiento de semáforos, etc.; las corporaciones edilicias son simplemente una fuente de empleos para los miembros del partido que controla el Ayuntamiento. Recuerda alguien algo bueno o significativo que haya salido de estas instituciones burocráticas?.....Yo tampoco.
El absurdo incremento de los arbitrios en el Distrito Nacional, así como el excesivo incremento de la nomina por parte del Alcalde Santiago son ejemplos de que la incapacidad, la corrupción y el despilfarro no son exclusivo de un solo sector político sino mas bien es algo tripartito ya que tanto reformistas, peledeistas y perredeistas son reincidentes en la contratación de obras y concesiones de grado a grado, practicas de nepotismo y uso de los recursos del estado.
Cabe señalar que a los perredeistas hay que sacarles su comida aparte en cuanto a su doble moral y a sus practicas corruptas. El actual Alcalde de Santiago Gilberto Serrulle basó su campaña contra el anterior incumbente José Enrique Sued en la afirmación de que acabaria con la corrupción y falta de transparencia que (según el) afectaba al municipio de Santiago de los Caballeros, no obstante tan pronto asumió el cargo dispuso la compra de jeepetas sin previo concurso, se contrató a una empresa para la recogida de la basura carente de referencias y de reciente formación. Así mismo en el municipio de Santo Domingo Norte el nuevo Alcalde Francisco Fernández inició una amplia cantidad de obras las cuales están ya paralizadas, nombró una cantidad enorme de empleados a los cuales esta en incapacidad de pagarles los sueldos y para paliar esta situación ha iniciado una situación de acoso a los empresarios de la zona, dificultandoles la aprobación de licencias para construcción y ha dispuesto incrementos de arbitrios todavía mas amplios que los de Roberto Salcedo en el Distrito Nacional, a todo esto los servicios son tan o mas deficientes (si eso es posible) que cuando estaba Jesús Félix.
Algún día llegara el momento en que debamos reconsiderar la viabilidad de tener gobiernos municipales puesto que estos no cumplen con su misión de mantener limpias y organizadas las ciudades y municipios. Los ayuntamientos, tal como funcionan hoy en día, no son otra cosa que huacales repletos de botellas y no representan ningún bienestar para los contribuyentes.
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